La expedición de una serie de drásticas medidas restrictivas de la movilidad y de algunas actividades comerciales, para tratar de frenar el rápido crecimiento que registra la pandemia por contagio de COVID-19 en la ciudad de Montería, acaba de anunciar el alcalde, Carlos Ordosgoitia Sanin.
La primera de estas medidas está dirigida a realizar un cierre total del Mercado del Sur, a partir del miércoles 8 de julio hasta el 12 de julio, tiempo durante el cual se harán labores de desinfección de sus distintas áreas de comercio y cargue y descargue.
También se realizará el cierre de barrios por sectores y cuadras, teniendo en cuenta la mayor incidencia de casos por contagio del Coronavirus. Este operativo se iniciará en los barrios Cantaclaro, La Pradera, El Dorado, La Granja, Las Acacias y Santa Fé y serán cierres focalizados para mantener controlada la alta propagación.
En cuanto a las restricciones para movilidad, se anuncia el cambio de Pico y Cédula a partir del 13 de Julio, limitándose a dos dígitos, para permitir sólo la salida de dos grupos de personas por día; se establecerá la ley seca y el toque de queda del 11 al 12 de Julio y del 18 al 21 de Julio y finalmente a partir del próximo lunes 13 de Julio se restringirá el transporte de parrilleros en motocicleta en toda la ciudad de Montería.
Aunque el alcalde Ordosgoitia deja abierta la posibilidad de concertar algunas de estas medidas con los sectores y gremios interesados, no puede olvidar el mandatario monteriano que su más grande responsabilidad como autoridad administrativa es garantizar la vida y la salud de sus asociados.
La indisciplina social que han mostrado los ciudadanos de esos sectores señalados en las restricciones, mercado del sur, barrios, etc., no permite pensar que ante esta advertencia de la administración van a cambiar de actitud y dejar de ingerir licor y hacer fiestas en sus barrios, violando flagrantemente las medidas de prevención y bioseguridad que casi desde el inicio de esta pandemia han estado vigentes.